Parece que fue ayer. No nos lo podemos creer. ¿Final del Bachillerato? ¿De verdad que ya han terminado? Así es. Se van de Escuela Ideo a emprender otros caminos, diferentes; los que elijan. 

Os queremos despedir de la misma manera singular con que hemos vivido la última parte del curso 19/20, a distancia. Con un puñado de líneas que intentan resumir las múltiples emociones encontradas que nos produce, a vosotras también, a buen seguro, una despedida como esta: una suerte de alegría, satisfacción, orgullo y melancolía

Alegría de ver que vuestras hijas e hijos han terminado la última etapa educativa de las enseñanzas medias; satisfacción de ver su crecimiento académico y personal. Orgullo de contemplar su proceso de transformación física y mental a lo largo de este tiempo que,  incluso en no pocos casos, abarca toda su etapa de adolescencia. Y melancolía. Un anticipo de nostalgia de un grupo de 2º de bachillerato único, el primero que, en parte, alberga al alumnado de origen de la Escuela allá por los tiempos de Quintanapalla. 

Nos hubiera encantado transmitiros toda la emoción de la despedida de manera presencial, fundirnos en abrazos y reconocer en las miradas el paso del tiempo, los recuerdos, nuestro cuidado y el vuestro por vuestra hija, por vuestro hijo. La vida nos lo ha impedido, al menos, de momento. 

Ojalá nos sintáis muy cerca en estas palabras, que abarcan a todo el profesorado, el actual y el pasado, a cada una de las personas de la Escuela que, de un modo u otro, han acompañado a vuestra hija, a vuestro hijo, a lo largo de un tiempo vital precioso, de aprendizaje y, deseamos, disfrute también. 

Nos despedimos con la esperanza del reencuentro para darnos los abrazos y las enhorabuenas pendientes. Mientras, leednos con todo el cariño con que os mandamos este mensaje. 

Ángeles Garoz

Equipo de Bachillerato de Escuela IDEO